JUAN LUNA Y NOVICIO (1857 - 1899). Pintor filipino
RETRATO DE JOVEN CON VARA DE FLORES
Óleo sobre lienzo de 120 x 76cm.
Firmado LVNA en el ángulo inferior derecho
Enmarcado.
Al dorso se aprecian muy antiguas restauraciones.
Juan Luna y Novicio fue el principal pintor filipino del s.XIX, comenzó su formación artística en Madrid, donde se traslada de joven, enviado por su familia. En la Escuela de Bellas Artes de San Fernando destacó pronto, y su maestro Alejo Vera (1834-1923) le invita a que le acompañe a Roma, haciéndose cargo de sus gastos. Allí permanecerá Luna varios años, junto con la familia Benlliure, a caballo entre Barcelona y París, hasta que finalmente se instale en Paris en 1888.
A partir de entonces, empieza a producir obras para el mercado internacional, cosechando indudable éxito. Tras un escandaloso y cruento episodio familiar, regresa a Madrid, dirigiendo la decoración,del Pabellón Filipino de la Exposición Histórico Natural y Etnográfica de 1893. Posteriormente regresará a Filipinas, donde su renombre irá diluyéndose con el devenir histórico de la independencia.
Artísticamente, Luna, se vio muy influenciado en sus primeros años por la obra de Eduardo Rosales con quien coincidió en la Academia de San Fernando. Por la Antigüedad clásica en sus años en Roma y Paris, para finalmente decantarse por una mirada más costumbrista y nacionalista en los años de la independencia de su país.
La presente obra, puede enmarcarse en torno a 1895, cuando Luna prefiere ejecutar obras de mirada cotidiana. En ella representa a una joven vistiendo la ropa típica y más popular en la Filipinas del momento, una sencilla falda de rallas, camisa y encima, anudado, el típico pañuelo en pico. En las manos porta una delicada vara de flores lilas.
En el Museo Nacional de Filipinas, podemos encontrar una obra muy similar, titulada como La Bulaqueña, en la que una figura femenina, aparece representada vistiendo otro de los atuendos típicos, el María Clara, falda, camisa de mangas abullonadas y pañuelo sobre los hombros, y cuyo nombre procede de la ropa que usaba la protagonista mestiza de la novela de Rizal, Noli Me Tangere. Esta obra en concreto se considera La Mona Lisa filipina.
Ambas obras tienen un formato y tamaño similar, las dos figuras visten al estilo filipino del momento, aunque de distintas clases sociales, y muestran una mirada retraida y misteriosa característica, e incluso un parecido físico muy cercano.